HUEVO DE SAN COSME
Partiendo del espectacular entorno del embalse de Vadiello, la ruta al Huevo de San Cosme no solo ofrece vistas panorámicas de la Sierra de Guara, sino que también permite a los excursionistas descubrir antiguas ermitas, como la Ermita de San Cosme y San Damián, enclavadas en un entorno de serenidad y devoción en un paraje de ensueño.»
Bonita y sencilla ruta en la que podremos visitar uno de los lugares más bonitos de la Sierra de Guara. La ruta comienza en el pantano de Vadiello. Aparcamos nuestro vehículo en el parking que hay junto a la presa del embalse. En este parking tenemos un cartel indicativo con el recorrido de la peña de San Cosme balizado como S-7.
Los mallos son grandes farallones y agujas de conglomerados rocosos formados por cantos de tamaño medio cementados con material calcáreo. El tiempo y la acción continuada a lo largo de los años del agua, el viento, el hielo y el sol ha hecho que estás estructuras como el huevo de San Cosme evolucionen tomando estas formas redondeadas tan peculiares con forma de huevo.
Comenzamos la ruta cruzando la presa situada a los pies de los mallos de Liguerri. Una vez atravesada la presa el camino no tiene pérdida. El primer tramo es por un camino bien marcado de grava que bordea el embalse, y una última parte de hormigón hasta coger el primer desvío. Caminando por la pista de hormigón cogemos el primer desvío a la izquierda junto a la primera ermita de la ruta. Se trata de una ermita de 4 arcos. Justo aquí sale una senda a la izquierda que se introduce en terreno de bosque. Este primer tramo es hacia abajo y apenas a 20 metros veremos en frente nuestra la imponente peña de San Cosme y las ermitas de San Cosme y San Damián a sus pies. Continuamos unos 200 metros hasta que la senda cruza un pequeño arroyo. En este punto si nos desviamos apenas 10 metros en época de lluvias podemos ver una bonita cascada.
Seguimos el camino por la senda ya en terreno ascendente hasta llegar al segundo poste. Nos encontramos a 2,8 km del huevo de San Cosme. A unos 150 metros de este punto llegamos a un pequeño cruce en el que nos podemos desviar 50 metros a ver las ermitas aunque no podremos acceder a ellas.
Retomamos la senda que enseguida se convierte en camino ancho y nos encontramos con otro poste que nos marca 2,6 km al huevo de San Cosme. Muy cerca de este lugar se encuentra una de las ermitas prácticamente derruida en una bonita explanada herbosa desde la que podemos contemplar unas bonitas panorámicas de las ermitas de San Cosme y San Damián.
Seguimos por el camino y en apenas 10 minutos llegamos a una ermita con una fuente y bancos para descansar. La ruta continua por el camino en el que veremos otras dos ermitas, la última de ellas a nuestra derecha según subimos. Detrás de esta ermita podemos asomarnos a ver un precioso barranco, precaución si vamos con niños. A partir de este punto el camino se abre y se pierde la zona de sombra.
Tras 1 km aproximadamente llegamos un cartel grande a nuestra izquierda nos indica el camino a San Cosme a 1,2 km. Cuidado con no pasárnoslo de largo, ya que está un poco oculto.
En el cartel pone zona de uso limitado 3 Vadiello – San Cosme.
A partir de aquí volvemos a coger senda bastante frondosa entre árboles. Nuestro siguiente objetivo será un bosque de encinas con una senda perfectamente marcada. En este bosque se encuentra el último cartel que nos marca Huevo de San Cosme a 600 metros y 10 minutos. Tras un tramo prácticamente llano, la senda coge terreno descendente.
A 5 minutos aproximadamente del poste tener cuidado de no saltarnos el pequeño desvío que en apenas 50 metros nos lleva al mirador de San Cosme, un pequeño claro desde el que podemos divisar el imponente huevo de San Cosme. Suele haber unos hitos de piedra para marcar el camino. Tras las rigurosas fotos de turno retomamos la senda y en apenas 5 minutos por una empinada cuesta abajo llegaremos a los pies del huevo.
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COMO LLEGAR
La ruta comienza en el parking del embalse de Vadiello. En el mapa inferior podéis ver como llegar hasta él.